
Allí estaba, en la mesa de libros que se pone los domingos en mi iglesia. ¡No me lo podía creer: un libro de Corrie ten Boom de nueva publicación! En seguida fui hacia él, atraída como por un imán.
Asombroso amor / Errante por el Señor, un libro cuidadosamente publicado en una edición de lujo. ¡Qué buena idea: por fin una editorial española publicaba libros de Corrie ten Boom!
«Conocí» a Corrie y a su familia hace muchos años. Creo que el primer libro que leí sería El refugio secreto y luego, Misión ineludible y Amor, asombroso amor (que así se titulaban antiguamente los libros ahora publicados).
Después vi muchas veces la película El refugio secreto de World Wide Pictures, y releí estos libros una y otra vez, de tal manera que Corrie, su hermana Betsie, su padre y el resto de la familia llegaron a ser para mí personas muy cercanas, casi familiares, diría yo. Sus experiencias, sus lecciones de vida, su amor por el pueblo judío —amor que yo también comparto— han estado, y están, muy cerca de mi corazón y vienen a mi memoria muy a menudo, ayudándome de manera muy práctica en mi vivir cotidiano.
Pero mi deseo de comprar más libros suyos era imposible de satisfacer porque sencillamente no se publicaban en español, así que para mí Corrie se quedó en una especie de limbo permanente viajando de un lado a otro del mundo hablándole a la gente de Jesús.
Hasta que una circunstancia personal me hizo acercarme de nuevo a ella.
Mi querida madre estaba enferma, y una amiga mía me dijo que por qué no leía el libro que había escrito la última secretaria personal de Corrie, Pamela Rosewell, titulado Corrie ten Boom: cinco años de silencio. De nuevo imposible de conseguir, así que mi amiga me dejó una copia, que resultó ser para mí providencial, porque me ayudó muchísimo en el cuidado de mi madre, en sus también cinco años finales de vida. Lo que contaba Pamela sobre Corrie no eran cosas lejanas que leía en un libro sino lecciones de vida práctica que saltaban desde las hojas del libro y me ayudaban en el propio cuidado de mi madre. Y fue así cómo me enteré de qué forma había muerto Corrie y cómo habían sido sus últimos años de vida. Así que mis lazos con ella todavía se estrecharon más.
Después de esto he podido conseguir dos libros de ella de nueva edición en español: Reflexiones sobre la gloria de Dios y un devocional diario titulado Cada nuevo día. Todo lo demás que he leído han sido libros prestados o libros en inglés, y yo me preguntaba una y otra vez: si somos muchos a los que nos gusta Corrie ten Boom, ¿por qué no se publican más libros de ella en español?
Hasta que hace poco pude tener en mis manos Asombroso amor / Errante por el Señor en la cuidada edición de la Biblioteca de Clásicos Cristianos editada por Abba. Desde aquí felicito a Joan González Angurell, director de esta colección, por el acierto de elegir a una autora como Corrie.
Como pone en la introducción de este libro, puede que haya quienes la tachen de tener una teología muy simple; sí, es cierto, pero no debemos olvidar que esa teología «simple» la capacitó, entre otras cosas, para colaborar con la resistencia holandesa y abrir su casa a las personas necesitadas durante la segunda guerra mundial, y resistió el paso por las cárceles y el campo de exterminio nazi.
Fue una de las supervivientes de los campos de exterminio que más pronto empezó a hablar de su experiencia en los mismos y que antes se tuvo que enfrentar con la petición de perdón por parte de su propio torturador (puedes leerlo en este libro), y eso la libró de rencor por lo vivido y la facultó y dio autoridad moral para ir proclamando por todo el mundo algo que ella misma había experimentado en carne propia: «No hay foso tan profundo que no lo sea más el amor de nuestro Señor Jesús».
De nuevo felicito a Abba por haber introducido a Corrie ten Boom dentro de la Biblioteca de Clásicos Cristianos, y los animo a traducir y publicar más libros de esta autora, no solo para deleite de los que ya la conocemos, sino por la necesidad de difundir su obra entre aquellos que aún no saben de ella.
— Reseña de Mercedes Gasanz Saboya, una cristiana agradecida a Dios por lo mucho que le ha dado en la vida. Es médico y disfruta relacionando la medicina con las verdades de la Biblia.